Cristina
Scuccia, una monja de origen siciliano de 25 años, sorprendió a los
jurados del programa "La Voz" en Italia no solo por su impecable
interpretación, sino por su fuerza y naturalidad en el escenario.
“No
One” fue la canción seleccionada por Scuccia para interpretar durante
su presentación, en donde un grupo de jurados empiezan a escuchar al
cantante con sus sillas dando la espalda hacia el escenario, y si a
alguno de estos le llama la atención la voz del cantante, gira su silla
para finalmente ver el artista.
Scuccia se convirtió en tendencia en Twitter
minutos después de su particular performance, cuando miles de italianos
expresaron su cariño mediante "#suorcristina".
De acuerdo a medios locales, a Cristina le
preguntaron los jurados sobre qué pensaría el Vaticano viéndola cantar, a
lo cual ella respondió "espero que el papa Francisco me llame ahora".
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